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May 24

Accidentes en moto tienden a generar “depósitos humanos”

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  • Así lo indicó el director del Hospital de Traumas, Dr. Aníbal Filártiga, argumentando que los secuelares de este tipo de percances llegan a 80 y 100 por año.
  • Este centro asistencial del MSP atiende alrededor de 250 motociclistas heridos por semana, 1.000 al mes y 12.000 al año, aproximadamente.
  • En 100 millones de dólares promedia el gasto anual en la atención a motociclistas accidentados.

El Dr. Aníbal Filártiga, director del Hospital de Traumas, informó que son alrededor de 250 heridos por accidentes de motos los atendidos semanalmente en este centro asistencial del MSPyBS, unos 1.000 al mes y 12.000 al año. Refirió que, aunque estadísticamente disminuyó un poco la cantidad de accidentes, es insignificante. Pero los accidentes son más graves que antes.

“No se usa casco. A pesar de que mejoró un poco su uso, no pasa del 35% o el 40% el uso de casco al momento del accidente y eso es fundamental. La cantidad de traumatismos de cráneo que tenemos es impresionante, y los que quedan con secuelas después de esos traumatismos son entre 80 y 100 por año. Son personas que quedan absolutamente inútiles, que están con traqueotomía, con sondas para alimentarse, no entienden, están paralizadas, con la mirada perdida, son personas muertas en vida la mayoría. Algunos quedan un poco mejor, pueden hacerse entender. Ese tipo de pacientes no tiene un lugar en el Paraguay a dónde ir. Algunas son capaces de soportar el gasto que significa pero la mayoría de ellos vuelve a su ranchito, sin los más elementales aparatos y se llenan de escaras, porque a estos pacientes hay que cambiarse de posición cada rato”, explicó Filártiga.

En ese contexto, el doctor agregó que el hospital les atiende mientras es imprescindible que estén internados, pero llega un momento en que se estabilizan, es decir, ya no empeoran ni mejoran, y ocupan una cama que es vital para gente que llega grave. “No puedo tener en el hospital a un paciente en esas condiciones mientras llegan otros que necesitan ser salvados. En este momento, Traumas sería un hospital de secuelares porque realmente todos quieren quedar ya que no tienen forma de hacer frente a esa contingencia en sus casas. Pero llega un momento en que se les envía con la ambulancia hasta su vivienda y dejamos libres estas camas para los siguientes que están llegando”, explicó, al tiempo de poner en relieve que la gran mayoría de no tiene cómo enfrentar esta situación porque carcomen la economía familiar.

“Por eso pienso que en algún momento se tiene que hacer un lugar para esta gente, verdaderos depósitos humanos, porque lamentablemente a eso se va a llegar. Las secuelas tienen un amplio margen, algunos quedan completamente vegetales y otros tienen algunas funciones todavía prevalentes”, sostuvo.

Inconciencia, falta de control y de transporte público de calidad, los ingredientes fatales

El profesional refirió que existe mucha inconciencia. “En este momento estamos asistiendo asombrados a una cada vez más frecuente circunstancia en que dos motos chocan. Quiere decir que hay un grado de inconciencia”, explicó.

Pero añadió que algunas responsabilidades no se deben evadir, como las de brindar más opciones de transporte público a la ciudadanía para que no se vea obligada a usar necesariamente este tipo de vehículos.

“Yo digo que el pecado original de esto es la falta de transporte público. No es bueno, no es suficiente y no es de calidad nuestro transporte público, a pesar de que se están haciendo esfuerzos permanentemente por mejorarlo. El día que sea suficiente y bueno, y eso está demostrado en otros países, la gente va a dejar sus vehículos. En París, hasta los ministros andan en el metro y dejan sus autos, pero desde luego nosotros estamos lejos de eso. Aquí el tipo que está en una compañía, a 9 kilómetros de Capiatá, tiene que venir en algo porque no tiene cómo salir a la ruta y luego tomar el colectivo y venir colgado”, indicó.

Otro factor preponderante en las estadísticas de accidentes es el alcohol. Durante el día, en el hospital de Traumas, 1 de cada 3 accidentados está alcoholizado y, durante la noche, 2 de cada 3.

Igualmente, el director del centro asistencial recordó la responsabilidad civil de las compañías que venden motocicletas, resaltando que deberían ser más exigentes. “No digo que no sea un negocio absolutamente lícito y que ellos están dando trabajo a muchos paraguayos, todo eso está bien. Pero no se debería entregar con tanta facilidad una moto. Es como vender revólveres en la vereda, ya sabemos que es un arma mortal, pues entreguémosle con un compromiso de responsabilidad a quien va a usarla, no sabemos si es epiléptico, si es drogadicto, si tiene noción de cómo manejar. Falta control y falta castigo. La gente chatea manejando moto”, expuso, al tiempo de recordar que los depósitos de la Policía Municipal están llenos de motos decomisadas y que nadie reclama porque la multa es más cara que ir a comprar una nueva.

¿Cuánto se gasta en estos pacientes?

Aníbal Filártiga refirió que el presupuesto del hospital a su cargo es de es alrededor de 40 millones de dólares. A eso hay que agregar todos los insumos y equipamientos, que suman otros 20 millones de dólares al año. También se suman sangre, lo que gasta el paciente, que es un 3 al 5% del gasto total, el lucro cesante (porque son todos en edades de trabajar), y lo que pone otras instituciones del Estado como la SENADIS y la DIBEN.

“Se suma y queda fácilmente entre 80 y 100 millones de dólares el gasto por accidentes de motos”, puntualizó.